El pasado viernes 6 de agosto salió publicado el Real Decreto 1000/2010 que aprueba la obligatoriedad de visado sólo en algunos trabajos profesionales: edificación, minas y explosivos. Pero el gobierno no ha determinado su obligatoriedad para las líneas de Baja Tensión que discurren bajo nuestras calles o aquellas que discurren por las fachadas de nuestras casas. Tampoco lo centros de transformación, ni tan siquiera los aparatos a presión, depósitos de combustibles o gasolineras.
¿A qué razones obedece esa selección? Desde luego no a criterios de seguridad. Si el Gobierno pretende liberalizar los servicios profesionales, desde luego, ése no es el camino.
Una liberalización debe ir acompañada de cierto control, y para ello se aprobó el pasado mes de mayo el Real Decreto 559/2010, de 7 de mayo, por el que se aprueba el Reglamento del Registro Integrado Industrial. Se supone que se establecerá un control centralizado e interconectado con las Comunidades Autónomas, de toda la actividad industrial (instaladores y proyectistas incluidos). Por ahora no hay nada en marcha y la no obligatoriedad de visado en instalaciones de seguridad es una realidad a partir del próximo 1 de octubre de 2010.
Si lo que se pretende es liberalizar todos las prestaciones de servicios y entrega de bienes, que se liberalicen todos, sin excepción y que se dejen de protejer a determinadas actividades que gozan de la protección del Estado y así aseguran la continuidad de su actividad y engrosan cada vez más sus ingresos.
ResponderEliminarCon respecto al fin del visado, ya sabemos que en este país, hasta que determinadas medidas no tengan como consecuencia la muerte de muchos ciudadanos y aún así, tampoco se reacciona a tiempo, no va a pasar nada. Si controlando, ya suceden cosas y se defrauda sobremanera, sin ningún tipo de control, ya veremos lo que pasa.