Quizá es interesante desde el punto de vista de creación de una identidad profesional y personal propia y que además sea reconocida por el entorno. Pero ¿qué ocurre después? cuando creces y te rodeas de un equipo de trabajo, cuando sobreviene el reto de motivar y promocionar a tu gente para que se convierta en un equipo de alto rendimiento? Lograr que se identifiquen con los objetivos de la empresa, que se ilusionen por un proyecto común, lograr un equipo cohesionado y comprometido.
La selección de personas es la clave para conseguirlo, ¿perfiles adecuados? quizá no los mejores o mejor preparados, pero desde luego la clave está en identificar aquellos con las actitudes -no necesariamente aptitudes-, para lograr un equipo capaz de complementarse y adquirir un desempeño colectivo de gran rendimiento.
Existe, efectivamente mucho talento desaprovechado en empresas con poca o ninguna capacidad para motivar e ilusionar a las personas (¿sólo el dinero?) y ahí está la clave: "descubrir" a las personas, conocer lo que les motiva e ilusiona y convertirlas en equipos de trabajo ilusionados con un proyecto común.
Desde luego conseguir la implicación del equipo y motivarlo es una tarea complicada y que esa motivación esté incentivada por algo más que el dinero, también.
ResponderEliminarEs imprescindible que el primer motivado e ilusionado sea el propio jefe o cabeza del equipo, y este hecho muchas veces no se da. También es importante tener la capacidad de comunicar y llegar a los demás, de hacerse entender y transmitir ideas a los miembros de un equipo. El hacer llegar la ilusión y el entusiasmo por un proyecto y contagiarlo a las personas. El saber escuchar, compartir ideas e iniciativas, entender también las motivaciones y necesidades del equipo, que en muchas ocasiones nos pueden aportar algo y explicar determinadas actitudes y comportamientos de nuestros empleados. En el fondo, ser más humanos y menos máquinas, tratarnos como tales, dejando aparte las ambiciones a veces desorbitadas de tanto ánimo de lucro y tanto materialismo empresarial y pensar que bueno, es cierto que las empresas están para ganar dinero, pero que también pueden cumplir otros fines más sociales y solidarios, y que a través de los mismos también ganan, no dinero, pero sí prestigio, imagen y respeto. Pero quizá todo esto suene un poco utópico, no?...
Muy interesantes tus reflexiones. Me quedo con tu última frase, sí, resulta utópico pero entiendo que posible! Muchas empresas lo logran, el problema es aquellas Pymes sin recursos o que no se preocupan por estas cosas. Atendiendo a tus ideas, los Departamentos de RRHH deberían convertirse en motivadores de personas y de la mano de la Dirección/Gerencia, ayudar a conseguir un equipo de trabajo de alto rendimiento.
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